Al final lo hemos conseguido. Poder hacer los agujeros para las velas en las rodajas de madera y ahora en troncos. Ya hice el año pasado algunos portavelas , pero nos costaba mucho hacer el agujero, hasta que investigando e invirtiendo, hemos dado en el clavo. Los troncos están cortados, lijados y tratados, y cada uno es diferente.
Éste es el primero que público pero en mi cabeza hay ya miles de ideas.
Es un regalo único y personalizado, pues no hay dos iguales.
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